A diferencia de lo que algunos esperaban, la celebración de la Fista de La Tirana en calle Tucapel, se desarrolló en su primera jornada, con total normalidad.
Alrededor de las 22 horas transcurría todo normal, no transitanban feligreses con mascarillas, ni se evidenciaban grandes
aglomeraciones de gente, debido quizás, a que era el primer día de celebración.
Ayer, alrededor de las 12:30 horas comenzó la fiesta con la entrada de los Caporales, quienes piden la venía iniciando la entrada desde el Cristo hacia el templo y buscan la imagen de la virgen. Posteriormente se hace el tradicional golpe de puerta "se golpea la puerta, se abre el templo y comienza la fiesta".
Inmediatamente después se saca la imagen de la Virgen y se hace una pequeña liturgia, en donde se encomienda la Fiesta y a la gente que va a participar. El primer baile en hacer su salida fue San Lorenzo.
Consultado frente a la normalidad del desarrollo de la primera jornada de actividades, Nélsón Peña, sacerdote y asesor de los baile religiosos, destacó que "No ha habido ningún problema, el orden se ha ido dando como estaba presupuestado, tampoco hemos tenido ningún tipo de desorden, y en general la gente está contenta, hay buen ambiente incluso sabiendo que era la alternativa que nos quedaba al no ir al Santuario. La gente está animada, está contenta, está haciendo sus mudanzas con mucha devoción.
Los bailarines se conocen y tienen estructuras de trabajos muy similares, hay un buen complemento a nivel de turnos, a nivel de entrada, de calendario y las actividades son casi las mismas.
Probablemente hoy en la misa de la víspera a las 22 horas concurra más gente al sector de la parroquia "Nuestra Señora del Carmen". La actividad religiosa será en la calle, en primer lugar porque se nos pidió que las actividades masivas fueran en lugares con buena ventilación y dos porque es un lugar más amplio donde la gente pueda participar más tranquila.
La celebración ha estado bonita, repleta de emotividad. Si bien había mucha sensilibilidad por no poder participar en la fiesta grande; en definitiva al tener la fiesta acá en Arica ha generado sentimientos encontrados; por una parte la pena de no ir al Santuario, pero por otra la alegría de tener un espacio para celebrar y poder cumplir las promesas y las devociones".
Alrededor de las 22 horas transcurría todo normal, no transitanban feligreses con mascarillas, ni se evidenciaban grandes
aglomeraciones de gente, debido quizás, a que era el primer día de celebración.Ayer, alrededor de las 12:30 horas comenzó la fiesta con la entrada de los Caporales, quienes piden la venía iniciando la entrada desde el Cristo hacia el templo y buscan la imagen de la virgen. Posteriormente se hace el tradicional golpe de puerta "se golpea la puerta, se abre el templo y comienza la fiesta".
Inmediatamente después se saca la imagen de la Virgen y se hace una pequeña liturgia, en donde se encomienda la Fiesta y a la gente que va a participar. El primer baile en hacer su salida fue San Lorenzo.
Consultado frente a la normalidad del desarrollo de la primera jornada de actividades, Nélsón Peña, sacerdote y asesor de los baile religiosos, destacó que "No ha habido ningún problema, el orden se ha ido dando como estaba presupuestado, tampoco hemos tenido ningún tipo de desorden, y en general la gente está contenta, hay buen ambiente incluso sabiendo que era la alternativa que nos quedaba al no ir al Santuario. La gente está animada, está contenta, está haciendo sus mudanzas con mucha devoción.
Los bailarines se conocen y tienen estructuras de trabajos muy similares, hay un buen complemento a nivel de turnos, a nivel de entrada, de calendario y las actividades son casi las mismas.
Probablemente hoy en la misa de la víspera a las 22 horas concurra más gente al sector de la parroquia "Nuestra Señora del Carmen". La actividad religiosa será en la calle, en primer lugar porque se nos pidió que las actividades masivas fueran en lugares con buena ventilación y dos porque es un lugar más amplio donde la gente pueda participar más tranquila.
La celebración ha estado bonita, repleta de emotividad. Si bien había mucha sensilibilidad por no poder participar en la fiesta grande; en definitiva al tener la fiesta acá en Arica ha generado sentimientos encontrados; por una parte la pena de no ir al Santuario, pero por otra la alegría de tener un espacio para celebrar y poder cumplir las promesas y las devociones".
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